Hace poco la provincia de Mendoza cerró el basural a cielo abierto más grande de la provincia en la localidad de Puente de Hierro. Esto aparece como un avance en materia ambiental, pero generó impacto laboral en las familias de recuperadores de la zona. A esta situación se suma el vuelco de aguas cloacales crudas de colectores colapsados.
El vertido comenzó a hacerse sobre canales de riego, y ante la queja de los productores, sobre todo los de verduras, se comenzó a realizar sobre campos incultos. La capacidad de los campos para recibir tanta materia fecal se colapsa rápido y empiezan a haber aguas cloacales en los caminos y cerca de casas y escuelas.
El diputado provincial Emanuel Fugazzotto fue contundente: “Es una locura pensar que entre 80 y 90 hectáreas están siendo inundadas por la caca que está tirando Aysam sin ningún tipo de tratamiento. Se están armando lagunas que son focos de infección, en los que ya se están muriendo animales porque no están señalizados, no hay perímetro, no hay carteles”.
Además destacó que es un peligro para la salud: “es un foco de infección enorme que el gobierno provincial está generando en la zona de Puente de Hierro, donde en teoría iban a producir un saneamiento con el cierre del basural y ahora les cambian el basural por las lagunas de caca”
Debido a esta situación se realizarán una serie de denuncias en la Fiscalía de Delitos Ambientales: “No puede realizarse obra pública sin un cartel que indique plazo, tiempo, quién la está ejecutando, cuánto representa esa obra, más allá de todo, porque necesitamos saber quiénes son los responsables”, remarcó Emanuel Fugazzotto del Partido Verde. |