Los gobiernos de Tucumán y Santiago del Estero reafirmaron su compromiso de trabajo conjunto para el cuidado ambiental de la cuenca Salí-Dulce.
El ministro de Economía y Producción tucumano, Daniel Abad, mantuvo un encuentro con el defensor del Pueblo santiagueño, Daniel Edgardo Escobar Correa, donde se acordó intensificar el monitoreo de la calidad del agua y la supervisión de los afluentes industriales.
Balance de la zafra y coordinación interprovincial
Durante la reunión, de la que también participaron el secretario de Producción, Eduardo Castro, y el subsecretario de Medio Ambiente, Facundo Moreno Majnach, se evaluaron los controles realizados durante la reciente zafra azucarera.
Eduardo Castro destacó que el acompañamiento de la provincia vecina ha sido fundamental para garantizar que los ingenios cumplan con las normativas ambientales, señalando que se realizaron inspecciones y análisis continuos de la calidad del agua que desemboca en el dique Frontal.
Por su parte, Daniel Escobar Correa valoró la coordinación constante con las autoridades tucumanas, especialmente en la fiscalización de los establecimientos vinculados a la industria azucarera, la base productiva de Tucumán.
Monitoreo y desafíos ambientales
El defensor del Pueblo santiagueño informó que el monitoreo de los establecimientos industriales está llegando a su fin con "muy pocos episodios" de contaminación. Indicó que algunos sucesos aislados, como la mortalidad de peces, responden en gran medida a causas naturales, aunque en ocasiones se combinan con la contaminación y el bajo nivel de precipitaciones que afectó a Tucumán.
En la misma línea, Facundo Moreno Majnach (Subsecretario de Medio Ambiente) explicó que el acuerdo de monitoreo entre ambas provincias, vigente desde hace tiempo, permite un control riguroso de la presencia de vinaza y ceniza en los cursos de agua durante la temporada de zafra.
De cara al fin de la zafra, y ante la estacional reducción de los caudales hídricos, ambas provincias anunciaron que se intensificarán los controles sobre la calidad del agua y los efluentes industriales para preservar el equilibrio ecológico de la cuenca.
Las autoridades de ambas provincias subrayaron su total colaboración para seguir trabajando coordinadamente en el saneamiento de la cuenca Salí-Dulce, garantizando un desarrollo productivo responsable. |